¿Qué hacer para tener una buena digestión?
Quizás esta es una preocupación cada vez más frecuente. La ingesta de comida es la única forma natural en la que los humanos accedemos a los nutrientes, es por esto que la mejor forma de hacerlo será teniendo una buena digestión. Hay quienes por muchos motivos sufren problemas a lo largo de este proceso digestivo. Cada uno de nosotros está bajo una constante amenaza de sufrir alguno de estos síntomas. Factores como la mala alimentación, la comida en exceso, el padecimiento de ansiedad o el abuso en el consumo de grasas pueden explicar este malestar.
Se dice que alguien tiene mala alimentación cuando una no coloca en su plato los grupos nutritivos recomendables. En cada plato de comida debe haber un balance entre proteínas, carbohidratos, grasas y vitaminas. La ausencia de cualquiera de estos elementos, podrá llevarlos a parecer de una mala digestión. Comer en exceso también afecta de forma significativa el proceso en que nuestro cuerpo absorbe los nutrientes. Si tomamos en cuenta que mientras más comida introducimos en el organismo, mayor será el tiempo de digestión, si ingerimos de una forma desmedida, le estaremos complicando la tarea a nuestro sistema digestivo.
Otra de las razones por las que se puede tener una mala digestión y provocar malestares estomacales, es el consumo de grasas saturadas. Nuestro hígado tardará mucho tiempo el desglosar las partículas de lípidos y por tanto para todos los procesos restantes será más lento.
La acidez puede atacarte en cualquier momento. Toma nota de algunas de estas prevenciones
¿Qué hacer para tener una buena digestión?
Comer a las horas
A pesar de que el tiempo dentro de la agenda personal puede ser un poco limitado, es importante dedicarle un tiempo de entre 25 y 30 minutos a la alimentación en cada comida. Esta es una de las principales maneras de garantizar un ritmo estable en la descomposición de los alimentos y su aprovechamiento nutricional.
Evitar los líquidos a la hora de comer
Para ayudar a la digestión, se recomienda no consumir líquidos a la vez que alimentos sólidos. De esta forma, la comida no se obstaculizará y se podrá movilizar mejor dentro del tracto restante del proceso. Lo más apropiado será siempre consumir los líquidos entre las comidas. Hay culturas asiáticas que antes de comer suelen beber infusiones. Estas permiten distender un tanto el estómago y así garantizar que los alimentos no caerán una forma “Pesada”.
Consumir alimentos integrales y naturales
Aquellas fuentes de nutrientes cargados de fibra, posibilitarán que el paciente tenga un proceso de digestión más rápido y más cómodo. La fibra es altamente recomendada por su carácter natural. Las frutas son altas en fibra, por lo que su ingesta diaria hará notar muchos cambios.
Evitar consumir productos artificiales
Este quizás es uno de los inconvenientes por los que cada vez son más las personas que sufren de problemas digestivos. El rápido acceso a una comida que puede terminar siendo perjudicial para nuestro cuerpo, determina mucho del tránsito de los alimentos por el organismo. Estas comidas artificiales están cargadas de químicos altos en sodio, azúcares procesadas o harinas muy refinadas. Si volvemos a la idea de la consumición de alimentos integrales, esto se explica por la naturalidad de sus componentes. Así se tendrá mayor efectividad en el proceso digestivo. En consecuencia, aquellos alimentos que estén más cargados de fuentes artificiales, tendrá una digestión un tanto incómoda para el paciente.
Evitar el consumo de tabaco, alcohol y café
Aquellas personas que consuman algunas de estas sustancias mencionadas, serán más propensas a sufrir de acidez. Ellas irritan las paredes del estómago y hacen más dura la tarea digestiva.
Más que hablar de algún consejo asociado a la medicación, lo más importante cuando hablamos de salud estomacal y digestiva, es considerar darle prioridad al propio cuerpo. Pensar qué esa frase que ya es cliché quizás “somos lo que comemos”, toma cada vez más fuerza.
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